World of Warcraft Wiki
Registrarse
Advertisement
Español Culto de los Malditos
Inglés Cult of the Damned
Icon of the Damned
Líder Rage Winterchill( en ausensia de Kel'Thuzad) Kel'Thuzad
Líderes secundarios Dar'Khan Drathir,Stormbringer(fallecido), Ul'haik Hadanot, Lady Deathwhisper
Razas IconSmall Human MaleIconSmall Human Female Humanos
IconSmall High Elf MaleIconSmall High Elf Female Altos Elfos
IconSmall Orc MaleIconSmall Orc Female Orcos

todos muertos vivientes

Miembros 10.000
Capital Naxxramas
Principales emplazamientos Stratholme, Scholomance, Andorhal, Deatholme
Lugar de Operaciones Lordaeron, Northrend
Afiliación Azote

El Culto de los Malditos es una organización de razas vivas que sirven al Lich King. La mayoría de sus miembros son humanos aunque incluyen cualquier otra raza. El Culto fue fundado durante los primeros días de la Tercera Guerra cuando el Azote aún era fiel a la Legión Ardiente y se estableció en Lordaeron.

Desde su prisión helada en Northrend, Ner'Zuhl - el primer ocupante del cargo de Lich King - contactó telepáticamente con hombres, orcos y elfos que sintieran deseo por obtener un gran poder. Muchos de ellos aceptaron la llamada; el más famoso Kel'Thuzad, por entonces archimago del Kirin Tor, que se convirtió en lich y líder del Culto de los Malditos.

Los sectarios - como se llaman sus miembros - aspiran a convertirse algún día en no-muertos, uno de los mayores honores para ellos. Su aspecto, aún vivo, resutlta no obstante beneficioso para poder espiar e infiltrarse en organizaciones enemigas al Azote sin levantar sospechas.

Mientras que los miembros actuales del Culto de los Malditos son individuos entusiastas totalmente dedicados a su causa, muchos de los reclutas nuevos son tímidos y débiles de voluntad, inseguros de sí mismos. Impopulares, personas maltratadas, a menudo consideradas fracasadas en su oficio o en su vida en general, son propicias para la manipulación del Azote, ya que no tienen mucho que ostentar en un primer momento. Con la promesa de riqueza, poder y conocimiento, lo que los motiva, el Culto los atrae. Cuando los mortales se comprometen con el Culto, se ven obligados a beber un brebaje que les roba su voluntad y los esclaviza para siempre al servicio del Rey Exánime, para ayudarles con el acto final de su sumisión, el brebaje que toman liga su espíritu al del Rey Exánime haciendo imposible traicionarlo o liberarse de su control, los únicos autorizados para convertir a los miembros del culto en el regalo de la no-muerte son los Lich, siempre que Kel'thuzad lo autorice, si algun miembro del Azote atacara a un miembro del Culto la única pena posible es la muerte, ya que Kel'thuzad adora a sus miembros.

Posteriormente, se les entrega un orbe de ilusión, que sirve para disfrazar a un miembro del Culto, lo que les permite tener un paso seguro, infiltrarse, o simplemente mezclarse con el enemigo, para estar seguros y bajo plena influencia de los poderes del Rey Exánime, dispuestos a trabajar sin descanso para difundir la voluntad del Azote. Los miembros ven al Azote con envidiosa fascinación, y muchos se sentían de esta manera antes de que cualquier influencia oscura ayudara a convertirlos. Los muertos vivientes aparentemente desafían el orden natural de las cosas y demuestran un potencial ilimitado, ya que si uno puede vencer a la muerte, puede hacerlo todo. Ser muerto viviente es la mayor meta que uno puede tener en la vida. Se considera una recompensa por una vida bien vivida (de acuerdo al Azote, por supuesto) que sea otorgada la no-muerte. A veces hay rumores de disidencia en las filas cuando algunos creen que sus enemigos caídos están dotados con la no-muerte inmerecidamente, mientras que los cultores deben trabajar para recibir ese pago divino. Estos rumores son a menudo sofocados rápidamente, por lo general con la amenaza de la muerte sin recompensa final. Los funcionarios en el Culto explican que sus enemigos mueren y se convierten en aliados porque sus números son más grandes que los del Culto de los Malditos. Si el Azote sólo alzase a los mortales que se lo merecen, no sería la gran fuerza que es hoy. El Azote necesita al Culto porque necesita mortales a su servicio.

Advertisement